No cabe duda de que un Ferrari como este es espectacular en cualquier situación que se plantee. Estas magníficas fotos de Raúl Salinas nos muestran un 275 GTB paseando por las calles de Madrid, en las que la compañía de los coches actuales hace que luzca aún más encantador. Además de conservar las matrículas provinciales de Lugo, ¡este coche tiene muchas batallitas que contar!
De la mano del piloto Oscar Caprotti, este Ferrari fue importado de Suiza a España y usado en distintas competiciones hasta que un accidente interrumpió la carrera deportiva de este coche. La reparación del mismo fue más costosa de lo esperado y el conflicto entre el dueño del coche y los mecánicos acabó siendo investigado. Esta investigación supuso el embargo del 275 ya que no se habían cumplido todas las normas de importación de esa época. Así pues, al coche se le quitó el motor y fue subastado por un precio muy inferior al del mercado. La puja fue ganada por un lucense, y por eso este coche tiene matrícula de Lugo. Pese a que por el formato de la misma parezca que es de Lucerna, Suiza.
Después de montarle un motor original, su propietario decidió llevar a cabo algunas mejoras, incorporando las puertas y el capó de aluminio y los 6 carburadores Webber de doble cuerpo que aumentan 20 cv de potencia, haciendo un total de 300. Pese a que este coche salió de la fábrica en 1964 pintado de color gris plata, durante varios años lució una pintura Rosso Corsa. Más adelante fue devuelto a su color original, como podemos ver en las fotos de Raúl.
Bajo el capó encontramos un colosal V12 de 3.3 litros, que con las modificaciones anteriormente mencionadas consiguen hacer más rápida esta joya.
Este Ferrari es uno de los más míticos del país. Con casi medio siglo de vida y una historia ajetreada a sus espaldas, ¡sigue en perfecto estado!
