El Rapide S es la berlina más rápida que Aston Martin ofrece a día de hoy. Con un V12 de seis litros y 558 cv de potencia, no es precisamente el coche más respetuoso con el medio ambiente. Sin embargo, Aston Martin se ha propuesto conseguir unas cifras de escándalo con esta berlina sin renunciar al cuidado de nuestro planeta, por eso ha nacido el Hybrid Hydrogen Rapide S. Un Rapide desarrollado con la colaboración de los expertos de Alset Global. Ha sido avistado en el mismo lugar donde ha batido un récord: Nürburg.
Este Rapide S se ha posicionado como el primer coche en correr una carrera en Nürburgring Nordschleife sin producir CO2. El día 19 de mayo disputó una carrera de larga duración en el circuito alemán, la ADAC Zurich Nürburgring 24 Hours. Este peculiar Rapide puede funcionar usando el 100% de su potencia del motor de gasolina, usándola sólo del de hidrógeno, o combinando los dos combustibles. Cuenta con cuatro tanques de 3.5 kilos de hidrógeno que tuvieron que ser repuestos en muchas ocasiones en la carrera del pasado 19 y 20 de mayo. El consumo de hidrógeno no ha sido desvelado por la marca británica, pero en el peor de los casos, siempre queda la gasolina. Sigue sin ser el coche más ecológico del mundo, ya que al usar gasolina tiene emosiones de CO2, pero es un buen avance. Aston Martin quiere demostrar con este experimento que hay muchas posibilidades para un futuro algo más sostenible y que si hay que acomodarse a otros combustibles, lo van a hacer. De cualquier modo, la posibilidad de que en un futuro cercano esta tecnología se aplique a los coches de calles es muy remota.
