El avistamiento del día de hoy es un modelo que ya casi se podría considerar un clásico. Presentado en el salón de Ginebra de 1993, marcó sin duda las pautas de los Aston Martin modernos. Con un diseño mucho más moderno que el de sus aristócratas antepasados, el Aston Martin DB7 mantenía los rasgos que necesitaba para ser un Aston Martin. Potencia, elegancia y lujo o como dirían ellos: Power, Beauty & Soul.
El Aston Martin DB7 es un coupé con una configuración interior 2+2, con las plazas traseras poco practicables. Combina magistralmente el lujo y la potencia, pero de manera muy distinta a como lo hace Bentley por ejemplo. Aston Martin busca emocionar a la gente al volante de sus coches, por lo que el apartado dinámico se pone a punto de manera intensiva. Hoy en día muchos critican que Aston Martin se ha radicalizado demasiado, con suspensiones más duras y deportivas, que priorizan el comportamiento dinámico al lujo y confort de marcha. El DB7 todavía mantenía unos niveles de lujo y confort muy altos y es un coche valorado a día de hoy. El DB7 lanzado en 1994 montaba un motor de 6 cilindros bóxer sobrealimentado con un compresor volumétrico, contaba con 335cv y 489nm de par. El modelo que os traemos hoy como avistamiento del día es el restyling lanzado en 1999 y llamado DB7 Vantage. Sustituyó el motor de 6 cilindros por un V12, mucho más refinado y a la altura del coche, el motor de 6 litros de cilindrada producía 420cv y 540nm de par, con unas prestaciones ya importantes, como por ejemplo un 0 a 100kmh en tan solo 5,1 segundos. La unidad que el spotter Coopster avistó en la milla de oro de Madrid nos parece una unidad espectacular, tanto por su estado en conservación como por la combinación de colores, plata con el interior burdeos y partes en crema, ¡realmente bonito!
