Imagina que tienes un Lamborghini Gallardo LP570-4 Superleggera. Podrías sentirte ya muy afortunado, pero llegas tarde y no consigues hacerte con un Lamborghini Gallardo Super Trofeo. Ya sabes, la versión un poco más radical. Podrías acudir al mercado de segunda mano, pero tienes otra opción: Ajustar las piezas necesarias para convertir tu Superleggera en un Super Trofeo. ¿Es una buena, o una mala idea?
Estuvimos estudiando el siguiente avistamiento, y el interior fue decisivo. Detalles más lujosos como un sistema multimedia, un volante mejor y menos fibra de carbono que en el Super Trofeo real. Es posible que en un futuro se ajustase todo, como ya se le han montado un difusor ridículo, un labio delantero muy inusual y un alerón enorme. Por lo que parece, este coche será usado sólo en circuitos. Una afición muy exclusiva. 
