4 mar 2013, 16:30
Uno de los roadsters más rápidos del mundo, eso es lo que hay en el stand de Brabos del Salón de Ginebra. Basado en el Mercedes-Benz SL 65 AMG, ya de por sí es un coche rápido, pero todos sabemos que los chicos de Bottrop no se contentan con eso. En cuanto a la estética es bastante conservador, aunque la enorme toma de aire del capó augura un potentísimo motor, el verdadero protagonista de la preparación. Su nombre delata los 800 cv que tiene, pero lo más bestial es el par motor de 1420 nm. Desafortunadamente lo han limitado para no rendir más de 1100 nm.